Cuando la iniciativa de la Internacional de Servicios Públicos (ISP) para la igualdad de género en África Oriental entra en su fase final de ejecución, los sindicatos de los servicios públicos de Ruanda destacan como ejemplos regionales de lo que puede conseguir una acción sindical decidida, organizada e integradora. A pesar de la prematura conclusión del proyecto - inicialmente previsto hasta 2027 - los sindicatos ruandeses han demostrado que es posible un verdadero cambio estructural en un corto espacio de tiempo cuando el objetivo se ajusta a la estrategia.

En la reunión nacional de mujeres dirigentes, celebrada los días 22 y 23 de mayo de 2025 en la sala de conferencias CESTRAR de Kigali, las dirigentes de los sindicatos afiliados a la ISP RNMU, SYPEPAP y SYPELGAZ se reunieron para consolidar los logros alcanzados y trazar el camino a seguir para mantener los avances más allá de los plazos fijados por los donantes. Con el apoyo de Union to Union, Kommunal y Akademikerförbundet SSR (ASSR), el taller reflejó el compromiso permanente de la ISP con la creación de servicios públicos sensibles a las cuestiones de género y de estructuras sindicales democráticas en toda la región.

Transformar los sindicatos desde dentro

Lo que distingue a Ruanda es el nivel de apropiación y transformación interna alcanzado por sus sindicatos.

• LaRNMU ha reformado sus estatutos para incluir disposiciones de género y ha elegido a la primera mujer secretaria ejecutiva de su historia. También ha liderado los esfuerzos para crear salas de lactancia en todos los centros de salud pública, a fin de garantizar que las madres lactantes reciban apoyo en el lugar de trabajo.

• SYPELGAZ cambió la dinámica de género de su plantilla técnica -aumentando la participación de las mujeres del 30% al 46%- y consiguió que una de sus dirigentes fuera elegida miembro de la central sindical nacional, aumentando la visibilidad y la influencia de las mujeres dentro del movimiento sindical.

• SYPEPAP ha desempeñado un papel destacado en la promoción de marcos presupuestarios con perspectiva de género en las instituciones públicas de Ruanda. Su defensa ha contribuido a influir en importantes asignaciones, como los más de 237 millones de francos ruandeses anuales destinados a programas específicos de género en la Oficina de Agricultura de Ruanda. El sindicato también ha formado a más de 500 agentes en el lugar de trabajo, lo que ha llevado a la formación de comités de género funcionales en todo el país.

SYPELGAZ ha cambiado la dinámica de género de su plantilla técnica, aumentando la participación de las mujeres del 30% al 46%.

Cambio de política gracias a la presión sindical

Los sindicatos han expresado su agradecimiento al Gobierno de Ruanda por ratificar el Convenio 190 de la OIT en 2024, un paso clave que afirma los derechos de los trabajadores a un lugar de trabajo libre de violencia y acoso. La presión sindical también ayudó a dar forma y promover la certificación del Sello de Igualdad de Género (RS 560), otorgado a las instituciones que demuestran excelencia en las prácticas sensibles al género, con 19 organizaciones certificadas en mayo de 2024.

A través de una intensa labor de promoción y diálogo social, los sindicatos también han contribuido a reformas institucionales como la puesta en marcha de la Oficina de Seguimiento de las Cuestiones de Género (OMG) y el establecimiento de puntos focales de género en muchas instituciones públicas, mecanismos clave para llevar a la práctica los compromisos en materia de género.

De los resultados del proyecto a la construcción del movimiento

El final prematuro del proyecto no frenó el impulso. Al contrario, los sindicatos ruandeses están demostrando que la sostenibilidad depende de una profunda apropiación, una sólida gobernanza interna y una voluntad política compartida.

En todos los sindicatos, las políticas de igualdad de género están ahora integradas en los estatutos, los marcos de negociación colectiva y las herramientas de seguimiento. Lo que comenzó como un programa apoyado externamente se ha convertido en una agenda interiorizada y en una fuerza motriz para la transformación sindical a largo plazo.

Próximos pasos: De Ruanda a la región

La estrategia de la ISP reconoce que la creación de servicios públicos sensibles a las cuestiones de género requiere algo más que políticas: requiere liderazgo sindical, experiencia vivida y reforma estructural. Los sindicatos ruandeses ilustran este enfoque.

A medida que el proyecto mundial se acerca a su fin, la ISP seguirá aprovechando estos avances en toda África Oriental, utilizando las lecciones aprendidas para abogar por la plena ratificación y aplicación de los Convenios C190, C155 y C161 de la OIT en toda la región.