Reflexiones sobre el Día Internacional de los Pueblos Indígenas del Mundo

Los gobiernos y lxs responsables políticos pueden adoptar los conocimientos tradicionales indígenas para luchar contra la desigualdad, hacer frente a la emergencia climática y construir sociedades más centradas en el ser humano y multiculturales

Este verano, mientras los incendios forestales hacen estragos en gran parte del hemisferio norte, los impactos de la emergencia climática son difíciles de ignorar. Los sistemas económicos y políticos que crearon la crisis parecen incapaces de dar una respuesta eficaz. Pero en las Américas, lxs expertxs están recurriendo a lxs guardianes del conocimiento tradicional indígena para gestionar los incendios forestales catastróficos.

Un informe de 2018 elaborado por investigadores de la Fundación Prisma, con sede en El Salvador, señala que los servicios de bomberos deben colaborar con las comunidades indígenas que han practicado técnicas tradicionales de manejo del fuego "muy sofisticadas" para controlar los grandes incendios. 

En la provincia canadiense de la Columbia Británica, las Primeras Naciones Secwepemcul'ecw señalaron las malas prácticas forestales comerciales y la falta de voluntad para aprender de las estrategias tradicionales de su pueblo para la extinción de incendios al evaluar la respuesta oficial a los devastadores incendios forestales de la región en 2017. Las comunidades de Secwépemc, al igual que muchos pueblos indígenas, solían provocar pequeños incendios en primavera por motivos culturales antes de que esta práctica se suprimiera tras la colonización. Las quemas prescritas de baja intensidad limpiaban la tierra de hojas y ramas caídas que podían alimentar los incendios forestales, fomentaban el crecimiento de plantas medicinales y creaban barreras protectoras alrededor de las comunidades. El gobierno provincial, que gasta cientos de millones de dólares cada año en la lucha contra los incendios forestales, reconoce ahora el valor de la colaboración con las Primeras Naciones. En 2017, la Columbia Británica aprobó una ley para aplicar la Declaración de las Naciones Unidas sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas (DNUDPI) y ha iniciado un programa de liderazgo y tutoría indígena dentro de su servicio público como parte de los esfuerzos de reconciliación más amplios. Los movimientos de trabajadores también han asumido la reconciliación. La mayoría de los sindicatos canadienses tienen ahora comités para lxs miembros indígenas e incluso designan a responsables electos indígenas. 

El trabajo decente para los pueblos indígenas a través de una mejor representación en el personal del sector público es un elemento importante de la autodeterminación, pero el objetivo debe ser el proyecto más amplio de rediseñar los servicios públicos a través de una óptica descolonizada. En Australia y Canadá, lxs niñxs indígenas tienen más probabilidades que lxs no indígenas de ser acogidos por el gobierno y lxs jóvenes indígenas experimentan mayores tasas de abandono escolar, desempleo, pobreza y suicidio. Por ello, el reconocimiento de los vínculos familiares y los apoyos tradicionales de la comunidad indígena debe servir de base para el diseño y la prestación de los servicios sociales de salud, bienestar y cuidados. El concepto de "seguridad cultural" fue desarrollado por estudiantes de enfermería maoríes en Aotearoa (Nueva Zelanda) y busca "reconocer, respetar y alimentar la identidad cultural única de un/a paciente". La idea está ganando terreno en todo el mundo en respuesta a las necesidades y demandas de las comunidades indígenas. 

En el mundo actual de guerras y conflictos, crisis sanitarias, emergencia climática y escandalosas desigualdades, podemos recurrir a los pueblos indígenas en busca de esperanza y de una visión alternativa del mundo.

Incluso los sistemas de justicia, construidos a partir de nociones distantes y a menudo eurocéntricas del delito y el castigo, pueden aprender del conocimiento indígena. La justicia restaurativa indígena considera el delito como un daño a las personas, las relaciones y las comunidades. Su respuesta es reparar el daño a las relaciones, restablecer la paz e involucrar a las personas afectadas y a las comunidades en general para determinar qué se necesita para ello. Aunque el enfoque fue pionero entre los pueblos indígenas que reviven las formas tradicionales, ha creado oportunidades para que los actores estatales exploren alternativas a los sistemas legales rígidos. 

Los derechos de los pueblos indígenas están avanzando en todo el mundo e incluso influyen en los marcos constitucionales nacionales. La constitución de Canadá reconoce a los pueblos indígenas como socios fundadores junto con los colonos y se compromete a respetar los tratados. La nueva propuesta de constitución de Chile, que se ratificará en septiembre mediante referéndum popular, reconocerá por primera vez los derechos de los pueblos indígenas del país. La Constitución de Bolivia de 2009, encabezada por su primer presidente indígena, Evo Morales, establece el carácter plurinacional del país y reconoce las lenguas indígenas como oficiales. Su poético preámbulo dice: 

En tiempos inmemoriales se erigieron montañas, se desplazaron ríos, se formaron lagos. Nuestra amazonia, nuestro chaco, nuestro altiplano y nuestros llanos y valles se cubrieron de verdores y flores. Poblamos esta sagrada Madre Tierra con rostros diferentes, y comprendimos desde entonces la pluralidad vigente de todas las cosas y nuestra diversidad como seres y culturas. Así conformamos nuestros pueblos, y jamás comprendimos el racismo hasta que lo sufrimos desde los funestos tiempos de la colonia.

En junio de este año, las organizaciones indígenas de Ecuador lanzaron una huelga nacional con un ambicioso programa que integraba las demandas de los movimientos sociales aliados, incluidos los sindicatos y los grupos campesinos. Sus demandas eran transformadoras y holísticas, nada menos que la acción del gobierno en materia de justicia social, económica y medioambiental, incluyendo la protección de la Amazonía, el fin de la privatización de los servicios públicos y el rechazo del modelo de acumulación basado en las actividades económicas extractivas. La Constitución de Ecuador también reconoce su carácter inter y multicultural (plurinacional). El gobierno se vio obligado a acceder a las demandas tras 18 días de huelga popular (aunque está por verse si cumplirá sus acuerdos).  

Lamentablemente, el historial mundial de las relaciones de los gobiernos con los pueblos indígenas es una sórdida crónica de desplazamientos y expropiaciones, negligencia, paternalismo, promesas abandonadas, tratados rotos e incluso genocidio. Las reformas constitucionales en consonancia con los instrumentos internacionales proporcionan un marco para nuevas relaciones de nación a nación y modelos de gobernanza compartida basados en el respeto y la reconciliación. Además de la DNUDPI, el Convenio sobre Poblaciones Indígenas y Tribales de la Organización Internacional del Trabajo (C169) articula principios y derechos para la participación de los pueblos indígenas en el mundo del trabajo. Sin embargo, sólo 24 Estados han ratificado el Convenio hasta la fecha. Los gobiernos pueden iniciar su camino de reconciliación adoptando la DNUDPI y el C169. 

Entre los pueblos Ainu del norte de Japón y el extremo oriental de Rusia, la noción de kamuy se entiende mejor como la divinidad inherente a todas las cosas. Lxs Sami de Noruega, Suecia, Finlandia y la región de Murmansk (Rusia) creen que todas las cosas del mundo natural tienen un espíritu y una fuerza vital. El pueblo San del desierto de Kalahari, en el sur de África, se rige por una sociedad tradicional igualitaria en la que las decisiones se toman colectivamente por consenso. Similares visiones y prácticas holísticas del mundo constituyen un hilo conductor en todos los pueblos indígenas del mundo. 

En el mundo actual de guerras y conflictos, crisis sanitarias, emergencia climática y escandalosas desigualdades, podemos recurrir a los pueblos indígenas en busca de esperanza y de una visión alternativa del mundo. Otro mundo es posible. 

Recursos para el 9 de agosto, Día Internacional de los Pueblos Indígenas del Mundo.