Los derechos de las mujeres y las niñas de todo el mundo se ven amenazados por políticas fiscales discriminatorias a nivel mundial, regional y nacional. Las leyes y prácticas actuales permiten a las empresas multinacionales y a los muy ricos, en muchos casos, salirse con la suya al no pagar la parte de impuestos que les corresponde. Esto niega a los presupuestos de los gobiernos una fuente clave de financiación de los servicios públicos, como la salud, la educación y el agua potable, que es fundamental para hacer realidad los derechos de la mujer y la igualdad de género.

A nivel mundial, la elusión de impuestos y las exenciones fiscales a las grandes empresas cuestan a los países en desarrollo cientos de miles de millones de dólares cada año, lo que podría contribuir en gran medida a transformar la vida de las mujeres y las niñas en todo el mundo.

La justicia fiscal es vital para proporcionar servicios públicos que tengan en cuenta el género y que puedan ayudar a reducir o responder a la violencia contra las mujeres y las niñas, proporcionar acceso universal a la salud pública, garantizar que más niñas reciban una educación pública de calidad y apoyar la igualdad económica de las mujeres y reducir su trabajo de cuidado no remunerado.

Además de ser desproporcionadamente perjudiciales para las mujeres y las niñas, las políticas fiscales actuales también son generalmente más beneficiosas para los hombres. Un ejemplo de ello es la forma en que las políticas de impuesto sobre la renta de muchos países están estructuradas de manera que las deducciones fiscales son más accesibles para los hombres, ya que se les reconoce implícitamente como el principal sostén de la familia. Por el contrario, las políticas fiscales actuales no reconocen el trabajo de cuidado no remunerado que realizan principalmente las mujeres.

Asimismo, muchos países han aplicado o aumentado los impuestos sobre los bienes de consumo para compensar la pérdida de ingresos por los recortes de tributos para las empresas y la élite rica. Esto supone una carga fiscal injusta para las mujeres, ya que gastan una mayor parte de sus ingresos en la compra de bienes básicos.

Las organizaciones que participan en los Días de Acción Mundial están presentando una serie de recomendaciones a nivel regional y mundial, incluida la creación de un Órgano Tributario Mundial de las Naciones Unidas, de carácter intergubernamental e inclusivo, en el que todos los países tengan un asiento en la mesa y la misma participación en la determinación de las normas tributarias internacionales, a diferencia de la situación actual, en la que las normas mundiales son redactadas por un club exclusivo de países ricos.

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Para más información:
Inglés: https://www.globaltaxjustice.org/en/action/make-taxes-work-for-women
Español: https://www.globaltaxjustice.org/es/action/jornadas-impuestos-mujeres