Según, la representante del Comité de Mujeres del Cono Sur, Carolina Espinoza “la violencia laboral está claramente caracterizada por sesgos sexistas y afecta no sólo al sector público, sino que también al sector privado, de ahí la importancia de las herramientas de prevención que está impulsando el Comité de Mujeres del Cono Sur y Brasil con la ayuda de la ISP y la FES”, puntualizó la dirigenta.

En ese sentido, el trabajo de las mujeres en los países de Argentina, Brasil, Chile, Paraguay y Uruguay, ha permitido generar materiales y herramientas específicas sobre violencia en el trabajo para capacitar y preparar dirigentas y dirigentes especializados en la materia. La idea, “es que apoyen la acción de los gremios y se hagan cargo de la atención a las personas dañadas por la violencia laboral”, expresó Espinoza.

Una de esas herramientas es la guía de prevención que re-editó Chile este año, y que se está difundiendo en este tipo de talleres –que a la fecha suman 4- y que busca entregar contenido legal preventivo a las organizaciones respecto a cómo enfrentar la violencia laboral con sesgo de género en el sector público.

“El acoso laboral suele presentarse como violencia psicológica, y darse en distintos ambientes de trabajo”, expresó otra integrante del Comité de Mujeres de Chile, Selma Núñez al tiempo de explicar que “enfrentar la violencia contra la mujer, en cualquier ámbito, requiere transformar las normas y valores que la mantienen y terminar con los comportamientos que refuerzan las actitudes y comportamientos sexistas”.

Durante el primer día del taller, la representante del Servicio Civil del Gobierno de Chile, Karen Jiménez revisó el Manual de Buenas Prácticas Laborales del Gobierno, y explicó lo que se entiende por acoso laboral y cuáles son las manifestaciones de una conducta abusiva especialmente, los comportamientos, palabras, actos, gestos y escritos que puedan atentar contra la personalidad, dignidad o integridad física o psíquica de un/a trabajador/a poniendo en peligro su empleo o degradando el clima laboral.

En relación a esta definición, la especialista dijo que “el acoso laboral hay que identificarlo como un abuso de poder que atenta contra los derechos laborales de las personas, con consecuencias negativas para el clima laboral y que degrada a la persona que lo sufre”, y ejemplificó algunas conductas como por ejemplo, el asignar objetivos o proyectos con plazos imposibles de cumplir, sobrecargar selectivamente a la víctima con mucho trabajo, quitarles áreas de responsabilidad clave ofreciéndole a cambio tareas rutinarias o incluso ningún trabajo que realizar, entre otros.

Durante la tarde, la dirigenta de la CUT y editora de la Guía de Prevención de Chile, Ana Bell hizo mención a los contenidos de la guía, y se refirió a los procedimientos para preparar la denuncia. “Existen hasta el momento 252 procedimientos en Servicios Públicos para la Prevención y Tratamiento del Acoso Laboral, pero si el servicio no cuenta con un procedimiento, se debe iniciar un proceso de denuncia en los términos formales que establece el Estatuto Administrativo, tal como lo consigna el contenido de esta guía”, dijo.

El día 24 de noviembre, las mujeres y hombres debatieron acerca de la construcción histórica del género y su impacto en la violencia doméstica, laboral y social; para el día viernes terminar la semana con el lanzamiento de la plataforma de denuncia www.prevencion-acosolaboral.cl que empezará a funcionar en los cinco países a partir del 30 de noviembre.