Miles de trabajadores del saneamiento, entre ellos trabajadores cristianos, organizaron una gran protesta en Islamabad, capital de Pakistán, el 18 de abril, para expresar su oposición a los continuos esfuerzos de la Autoridad de Desarrollo de la Capital (CDA) por privatizar los servicios de saneamiento a través de empresas privadas. La manifestación fue organizada por el Sindicato CDA Mazdoor, el agente de negociación colectiva (CBA) oficialmente reconocido para los trabajadores del saneamiento en el establecimiento de la Autoridad de Desarrollo de la Capital.

Durante varios años, la CDA ha intentado privatizar la Dirección de Saneamiento. En 2017, un intento similar se topó con la fuerte resistencia del sindicato, que organizó protestas y solicitó la intervención judicial. El tribunal falló a favor de los trabajadores, deteniendo efectivamente la privatización.

La iniciativa actual consiste en la creación de una empresa de gestión de residuos sólidos encargada de hacerse cargo de los servicios de saneamiento mediante un proceso de licitación formal. La creación de una empresa de gestión de residuos independiente supone una amenaza directa para el empleo en el sector público y socava los derechos de los trabajadores del saneamiento. Suscita graves preocupaciones sobre el futuro de más de 2000 trabajadores del saneamiento empleados en Islamabad.

Inicialmente prevista para el 12 de abril, la licitación se pospuso debido a las protestas generalizadas. El sindicato CDA Mazdoor Union se dirigió a la Comisión Nacional de Relaciones Industriales de Islamabad y se le ha concedido una orden de suspensión hasta el 5 de mayo. Por lo tanto, el proceso de licitación se ha detenido por ahora.

Al referirse a la medida de la CDA, Chaudhry Muhammad Yasin, secretario general de la Federación de Trabajadores de Pakistán y alto dirigente del sindicato CDA Mazdoor Union, declaró: «La privatización propuesta de los servicios de saneamiento es inaceptable. Estos trabajadores han desempeñado un papel esencial en el mantenimiento de la limpieza de la capital y no deberían estar sujetos a tal incertidumbre».

Asad Mehmood, secretario general adjunto del sindicato CDA Mazdoor, añadió: «Si no se revoca esta decisión, consideraremos intensificar nuestra respuesta, incluida la posibilidad de una huelga en toda la ciudad. Instamos a las autoridades a que entablen un diálogo y retiren el proceso de licitación». La dirección de la CDA aceptará al sindicato CDA Mazdoor como agente de negociación colectiva.

Los manifestantes también están expresando su especial preocupación por el trato que reciben los trabajadores de saneamiento cristianos, que a menudo son víctimas de prácticas discriminatorias y se encuentran entre los más afectados por estas decisiones políticas.

Los líderes sindicales pidieron al primer ministro Shahbaz Sharif y al presidente de la CDA, Chaudhry Muhammad Ali Randhawa, que intervinieran de inmediato, retiraran la licitación de privatización y protegieran los derechos y los medios de vida de los trabajadores de saneamiento de la ciudad.

La CDA cuenta con 15 000 empleados que mantienen la ciudad en funcionamiento. Cualquier intento de privatizar servicios básicos sin consulta previa es profundamente injusto. El sindicato afirmó que sigue comprometido con las negociaciones pacíficas, pero que no dudará en defender los derechos de los trabajadores mediante la acción colectiva.