Un cuestionario contestado voluntariamente entre el 27 de marzo y el 29 de abril por 2.575 trabajadores brasileños de servicios esenciales que están en la primera linea de la respuesta a la pandemia de coronavirus revela que el 56% de las profesionales femeninas están experimentando sufrimiento psíquico. Entre los hombres, la tasa es del 44%. Las mujeres son el 73% de los que han respondido a la encuesta - el 83% del total de los encuestados son profesionales de la salud, el 51% son de las profesiones relacionadas a la enfermería y el 61% son funcionarios públicos.

Estos datos forman parte de una encuesta que es parte de la campaña "Trabajadoras y trabajadores protegidos salvan vidas", lanzada el 31 de marzo por la Internacional de Servicios Públicos (ISP) y sus afiliadas en Brasil, cuyo objetivo es, a partir de la información sobre las condiciones de trabajo, presionar a los gestores públicos y a los empleadores privados para que las mejoren. Las respuestas se recogen mediante un cuestionario en línea; la identificación no es obligatoria. Inspirada por la campaña mundial de la ISP, la iniciativa es impulsada por la oficina de esta organización en el Brasil y varias entidades sindicales afiliadas en este país.

"El sufrimiento psíquico de los trabajadores de los servicios esenciales en un momento de pandemia probablemente esté relacionada, entre otros factores, con la falta de equipo de protección personal (EPP) suficiente y la falta de capacitación adecuada para hacer frente al brote. Sin embargo, esta diferencia entre los porcentajes de mujeres y hombres no es sorprendente y nos da espacio para analizar esta cuestión desde las desigualdades de género: doble -o triple- horas de trabajo para las mujeres, relaciones laborales más precarias, falta de reparto de las tareas domésticas, mujeres como jefas de hogar y mayores responsabilidades, y acoso moral y/o sexual. Las mujeres profesionales son las más afectadas por el coronavirus, ya sea físicamente - porque son mayoría en el sector de la salud, por ejemplo - o psicológicamente, debido a estos temas que mencioné", dice Denise Motta Dau, secretaria sub-regional de la ISP para Brasil.

La encuesta muestra que las condiciones de trabajo y la protección de los trabajadores de ambos sexos no han mejorado en relación con las primeras parciales divulgadas: el 65% de los encuestados sigue afirmando que no hay suficientes EPP en el lugar de trabajo para cambio y saneamiento adecuados, mientras que el 69% de los profesionales de la salud informa de que no han recibido una formación adecuada sobre los protocolos de atención a la población, así como sobre el uso de los equipamientos.

Otros datos llamativos son que un tercio de los profesionales (35%) ha trabajado en jornadas de 12 horas o más en las últimas semanas y el 21% ha utilizado el transporte público para ir al trabajo, es decir, que también corren el riesgo de contaminarse cuando se desplazan. Además, en el 93% de los casos, no se ofrece ningun alojamiento a los trabajadores que no pueden regresar a sus hogares para no contaminar a los miembros de la familia que pertenecen a grupos de riesgo.