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La ISP pide que se incluya el trabajo decente para el personal sanitario en el Tratado contra la pandemia
Mientras se reúne por tercera vez el órgano de la OMS encargado de negociar un nuevo instrumento sobre prevención, preparación y respuesta ante pandemias, la ISP ha hecho un llamamiento a los gobiernos para que incluyan cuestiones cruciales que se han pasado por alto en el borrador conceptual cero que se debatirá del 5 al 7 de diciembre en Ginebra.
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Mientras el órgano de la OMS encargado de negociar un nuevo instrumento sobre prevención, preparación y respuesta ante pandemias se reúne por tercera vez, la ISP ha pedido a los gobiernos que incluyan cuestiones cruciales que se han pasado por alto en el borrador conceptual cero que se debatirá del 5 al 7 de diciembre en Ginebra.
El artículo sobre "refuerzo y mantenimiento de un personal sanitario cualificado y competente" es inadecuado para responder a las necesidades de los trabajadores sanitarios.
Los presidentes del INB de Sudáfrica y los Países Bajos informaron a los Estados miembros, a la ISP y a otros agentes no estatales que mantienen relaciones oficiales con la OMS, en una sesión informativa, de que ésta es la última oportunidad para incluir elementos que se reunirán en el borrador conceptual que se negociará el año que viene. Pedimos a nuestras afiliadas de todo el mundo que se pusieran en contacto con sus gobiernos para hacerse eco de nuestra petición de que se incluya el trabajo decente en el documento.
Los líderes mundiales han aplaudido el papel que hemos desempeñado los trabajadores sanitarios en la respuesta al COVID-19. Sin embargo, el artículo sobre "fortalecimiento y mantenimiento de un personal sanitario cualificado y competente" es insuficiente para responder a las necesidades de los trabajadores sanitarios. Un trabajo digno para el personal sanitario es un requisito para unos servicios sanitarios de calidad y unos sistemas de salud sólidos. Además, hemos aprendido que en un contexto en el que estamos conociendo un virus mientras estamos junto a pacientes infectados o potencialmente infectados, el principio de precaución es primordial para proteger al personal sanitario que se encuentra en primera línea.
Pedimos la inclusión del trabajo decente para los trabajadores sanitarios, así como la aplicación del principio de precaución en las políticas que afectan a la exposición al riesgo de los trabajadores sanitarios. Además, pedimos un artículo específico que proporcione medidas para garantizar un trabajo digno para el personal sanitario. Esto debería garantizar la inclusión explícita de mejores condiciones de trabajo, ratios adecuados de personal sanitario por paciente y los derechos laborales previstos en el Convenio 149 de la OIT.
La ISP también está preocupada por la falta de inclusión de disposiciones explícitas para la prevención. Se trata de una laguna enorme, y pedimos que se incluyan disposiciones explícitas para promover la prevención como punto de partida de la preparación.
Apoyamos firmemente un compromiso jurídicamente vinculante de exenciones temporales de la protección de los derechos de propiedad intelectual sobre productos de respuesta a pandemias durante las pandemias.
Se habrían salvado muchas vidas en la pandemia de COVID-19 si se hubiera renunciado a los derechos de propiedad intelectual sobre vacunas, terapias y diagnósticos, como propusieron India y Sudáfrica en la OMC, una propuesta que más tarde respaldaron más de 100 países durante casi 20 meses de debates.
Esta es una lección importante para el mundo, y para garantizar que esta situación se evite en cualquier pandemia futura, apoyamos firmemente un compromiso jurídicamente vinculante de exención de la protección de los derechos de propiedad intelectual sobre los productos de respuesta pandémica durante las pandemias (como se propone en el Art 7.2 a)(iv), y pedimos además la inclusión de la creación de un mecanismo permanente que active automáticamente esta suspensión cuando se declare una Emergencia de Salud Pública de Importancia Internacional (PHEIC).
Por último, aunque las pandemias son ante todo emergencias sanitarias mundiales, inevitablemente se convierten en crisis económicas, en las que los países de renta baja y media soportan la mayor carga. La prevención de las pandemias también requiere una arquitectura financiera mundial que garantice que estos países dispongan de recursos suficientes para inyectarlos en la construcción de sistemas de salud pública universales fuertes y resistentes.
Nos preocupa que los principios que subyacen al contenido sobre financiación sean débiles. Exigimos la inclusión del principio de justicia financiera o la aplicación del principio de equidad a la financiación de la prevención, preparación y respuesta ante pandemias.
Seguiremos de cerca los resultados del debate y presionaremos a los gobiernos para que rindan homenaje a las vidas de nuestros colegas que se perdieron en esta lucha incluyendo en este tratado disposiciones firmes que pongan por fin a las personas por encima de los beneficios.
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En estos momentos, los gobiernos de todo el mundo están negociando en la Organización Mundial de la Salud un nuevo Tratado sobre Pandemias, que dará forma a la recuperación de Covid-19 y determinará la forma de afrontar futuras crisis. Sin embargo, este Tratado sólo puede ser eficaz si responde a las voces de lxs trabajadores de la salud, cuyas experiencias y perspectivas a través de esta pandemia deben estar en el centro de este proceso.