Guatemala fue la opción que Chile decidió apoyar en esta oportunidad, pues se ha convertido en uno de los países más peligrosos para los sindicalistas, con alarmantes cifras de ataques violentos y asesinatos, generando un clima de miedo, tensión y represión sindical.

Según Natalia Pino, Coordinadora del CNJ de Chile y representante de la CONFUSAM este país fue elegido, "por los nexos sindicales vía ISP y por el compromiso adquirido por dirigentes chilenos que acudieron en marzo al Encuentro interamericano ISP realizado en Guatemala donde los Jóvenes sindicalistas guatemaltecos, liderados por Marlon Ramos – Sindicato de Aguas-, denunciaron violación a los derechos humanos y sindicales".

Por medio de  una carta de apoyo a los sindicalistas y una visita  a la Embajada de Guatemala en Chile, los Jóvenes  denunciaron  los atropellos de los derechos de los trabajadores de éste país, la constante vulneración de los derechos humanos y el tenso clima de inseguridad que los dirigentes sindicales se ven expuestos, solicitaron la intervención por parte de las principales organizaciones mundiales sindicales para alcanzar democracia y diálogo social, poner fin a la impunidad, una Reforma laboral acorde con las normas internacionales del trabajo, una circular del gobierno llamando al respeto de los convenios colectivos y libertad de asociación, la aplicación de convenios colectivos, los recursos adecuados para los servicios públicos, las asociaciones privado-público y un alto a la privatización de los recursos públicos, y un compromiso real con la Hoja de Ruta de la ISP.