Frenemos el brote de ébola ¡AHORA!

El mundo contuvo la respiración el 12 de mayo de 2017, cuando se confirmó que la República Democrática del Congo está en trance de sufrir un brote de la Enfermedad por el Virus del Ébola (EVE). Es la novena vez que este país centroafricano sufre una epidemia de ébola desde 1976.

Las trabajadoras y trabajadores sanitarios miembros de SOLSICO, afiliada a la ISP, han tomado las riendas de la respuesta inmediata necesaria para frenar esta preocupante situación. Se han confirmado tres fallecimientos por la infección desde el 22 de abril. Ha habido que esperar hasta el 12 de mayo para que el Ministerio de Sanidad declare oficialmente que existe una epidemia de ébola y reporte una morbilidad de nueve casos hasta la fecha, incluidas dos muertes.

El virus del Ébola se identificó por primera vez hace 31 años, cuando se produjeron dos brotes simultáneos en la ciudad de Nzara, ubicada en la actualidad al sur de Sudán, y el pueblo de Yambuku, junto al río Ébola, en la República Democrática del Congo, conocida entonces como Zaire. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), entre 1976 y 2013 se han producido 24 brotes de EVE, con 1716 casos, principalmente en África central.

El mundo fue consiente del temible poder del ébola con la epidemia que estalló en África occidental entre 2013 y 2016. Tras los primeros casos registrados en Guinea, en diciembre de 2013, el virus se propagó como un reguero de fuego por toda la región, afectando sobre todo a Guinea, Liberia y Sierra Leona. Se produjeron 11.310 muertes, de los 28.616 casos reportados a su paso.

Aparte de los tres países más afectados, se registraron muertes por EVE en Mali, Nigeria, Senegal, Italia, España, Reino Unido y los Estados Unidos. Supuso una grave emergencia sanitaria internacional, que contribuyó a reconfigurar la forma en que la OMS enfrenta las emergencias.

También sacó a la luz las carencias en la preparación frente a las crisis, que aquejan sobre todo a los sistemas sanitarios frágiles. Esta trágica situación no brotó de la nada. Se fue gestando durante años, fruto de la promoción de la agenda neoliberal de privatizaciones, liberalización y desregulación de los servicios, y de recortes en la financiación de servicios sociales como la sanidad.

La ISP formuló una Estrategia de intervención sindical para combatir la enfermedad por el virus del Ébola, para fortalecer la capacidad de los sindicatos de los países africanos vulnerables a brotes de EVE y de intervenir en el proceso político encaminado a construir sistemas de salud pública más sólidos y resilientes.

El sindicato SOLSICO de la República Democrática del Congo ha participado en dicha estrategia, estableciendo su respuesta rápida. Fue este sindicato el que contactó de inmediato con el Ministerio de Sanidad, para hablar sobre las medidas necesarias para frenar el brote que está apareciendo. Y sus miembros participaron en una sesión técnica, convocada el 15 de mayo por el Ministerio, en la que participaron los interlocutores necesarios para desplegar una respuesta urgente.

La epidemia actual plantea varios retos. En estos momentos está centrada en el pueblo de Likati, ubicado justo en medio de la densa selva ecuatorial del distrito de Aketi. Esto complica enormemente la accesibilidad, ya que Likati se encuentra a miles de kilómetros de Kinshasa, e incluso en los alrededores de la provincia de Bas Ulele, que cuenta con una población de alrededor de un millón de personas.

Es muy difícil llegar allí y el transporte de los equipos y el material de intervención ha resultado extremadamente laborioso. Likati carece, además, de un número adecuado de trabajadores y trabajadoras sanitarios con los conocimientos especializados necesarios para erradicar la epidemia.

Es el momento de que el mundo reaccione y frene este brote en seco. No podemos permitirnos otra crisis evitable de las proporciones que alcanzó la epidemia de África occidental. Es hora, también, de reiterar la necesidad de financiar adecuadamente la sanidad pública, y en concreto de invertir en la mano de obra sanitaria, para lograr un mundo en el que el ébola sólo sea un capítulo de la historia médico-social de la humanidad.

 

Para más información sobre la campaña de la ISP sobre el Derecho Humano a la Salud, véase nuestra página web.

Este artículo es un extracto del boletín “Derecho a la Salud – número 02/2017”. Suscríbase al boletín informativo el “Derecho a la Salud”. Envíenos sus artículos.