ANEIICH, sindicato afiliado a la PSI, logra renuncia de la máxima autoridad tributaria de Chile por caso de corrupción

Tras dos años de duros enfrentamientos, la Asociación Nacional de Funcionarios de Impuestos Internos de Chile, ANEIICH, afiliada a la PSI, ha conseguido un importante triunfo al presentar su dimisión, el pasado 12 de julio, el Director del Servicio de Impuestos Internos en el marco de una denuncia de corrupción sostenida por la organización.

En marzo del 2010, con la instalación del gobierno de Derecha, el Presidente de la República de Chile, Sebastián Piñera, nominó, como Director del Servicio de Impuestos, a Julio Pereira, abogado tributarista que provenía del mundo privado, siendo hasta su nombramiento socio de la auditora y consultora multinacional Price Watherhouse Coopers (PWC). Desde esa posición Pereira asesoró a las mayores empresas privadas del país en sus litigios tributarios con el Servicio de Impuestos Internos, que pasó a dirigir.

Estos antecedentes pusieron en alerta a los trabajadores organizados del SII, quienes exigieron a la nueva autoridad transparentar su pasado y librar a la institución de cualquier situación que pudiera comprometer sus funciones fiscalizadoras. La respuesta nunca llegó.
A mediados del año 2011, en medio de un escándalo financiero de la multitienda La Polar, que realizó masivas repactaciones ilegales de deuda a sus clientes para abultar sus utilidades, a requerimiento de ANEIICH la Contraloría General de la República obligó a Pereira a marginarse de toda decisión institucional respecto de la empresa, atendido que PWC era la auditora responsable en el empresa.

Un año después, en julio de 2012, medios de prensa revelaron que el SII había condonado multas e intereses por 125 millones de dólares a otra gran empresa, la multitienda Johnson´s, para que posteriormente fuera vendida al holding Cencosud, uno de los mayores conglomerados empresariales del país.

El inaudito monto de la condonación y los vínculos del entonces Director del SII con ambas empresas gatillaron una oleada de críticas hacia la el SII e impulsaron a la ANEIICH a exigir la salida de Pereira de la institución y la investigación de las irregularidades del proceso.

Durante 12 meses, el gobierno y el empresariado sostuvieron una cerrada defensa de Pereira, ante las acciones de la ANEIICH que llevaron a abrir investigaciones por parte de la Contraloría General de la República, el Ministerio Público y la instalación de una Comisión Especial Investigadora de la Cámara de Diputados.

En cada una de estas instancias se verificaron los conflictos de intereses y las irregularidades que intervinieron para aprobar la multimillonaria condonación a Johson’s autorizada por Julio Pereira. Durante el proceso, los trabajadores sindicalizados del SII desarrollaron acciones de movilización para reiterar su defensa de la probidad institucional y exigir la dimisión de la cuestionada autoridad. Así, en un ejercicio de unidad sindical inédito, se efectuó una consulta nacional a los funcionarios del SII, en que el 92% de ellos exigió la salida de Pereira de su cargo. A pesar de las contundentes evidencias, el Presidente de la República ratificó en dos ocasiones en su cargo a Pereira.

El pasado 11 de julio, tras un año de investigación y respondiendo a una denuncia presentada por la ANEIICH, la Contraloría General de la República emitió un informe ratificando las irregularidades en la condonación a Johnson´s, y estableció que Pereira autorizó además condonaciones por 25 millones de dólares a otras 9 empresas de las que era accionista. Finalmente, la presión de los trabajadores forzó al gobierno a asumir la dimisión de Pereira a su cargo.

Los trabajadores del SII celebraron este hecho como una victoria histórica de su organización sindical y de su compromiso con la probidad institucional y los servicios públicos de calidad. Su accionar ha sido saludado por numerosas organizaciones sindicales como un ejemplo de compromiso con un servicio público probo y de calidad. Hoy, los funcionarios del SII se han puesto en marcha para recuperar el rol y el prestigio del SII, institución fiscalizadora valorada como de excelencia hasta la llegada de Julio Pereira.