Desde entonces, lxs 600 trabajadores del centro de salud tomaron el edificio de la institución y realizarán vigilias y asambleas a la espera de una resolución favorable de la situación. Las afiliadas a la ISP en Argentina, FESPROSA y UPCN, estuvieron presentes en la asamblea general de lxs trabajadorxs del hospital el 7 de octubre afirmando su inclaudicable defensa de los puestos de trabajo y de la atención pública a la salud mental.

El hospital, que ya fue un Centro Nacional de Reeducación Social, se ha convertido en un Hospital de referencia nacional bajo la implementación de la Ley Nacional de Salud Mental. La institución emblema hoy atiende internaciones, consultorios externos, emergencias, hace formaciones, da medicación gratuita y es referencia en materia de violencia de género y en el tratamiento y apoyo a los traumas que devienen de la persecución de las diversidades sexuales.

“El Hospital Laura Bonaparte es un hospital de muchos años, un emblema en la ciudad de Buenos Aires, que atiende a los sectores más postergados y cuenta con un número importante de profesionales interdisciplinarios que brindan asistencia a toda aquella persona que se encuentre en situaciones de vulnerabilidad. En esta semana hemos visto seriamente afectada la posibilidad de que se continúe debido a un comunicado oficial del Ministerio de Salud que hablaba de una reestructuración de este, poniendo el foco en que el servicio de internación y de guardia dejen de funcionar. Esto obviamente afectaba no solamente las funciones del hospital, sino que ponían serio riesgo a los puestos de trabajo de los trabajadores de este hospital”, contó Diego Guerén, secretario general de UPCN del sector salud.

"Esta política de cerrar el hospital Bonaparte no es aislada

María Fernanda Boriotti, presidenta de la Federación Sindical de Profesionales de la Salud de la República Argentina (FESPROSA), afirma que el proceso de reestructuración del Hospital Laura Bonaparte es más una de las acciones del actual gobierno en contra la salud pública de Argentina. “Esto no marca más que las políticas de desmantelamiento de la salud pública que está llevando adelante el gobierno nacional desde que asumió y en particular la gestión del Ministerio de Salud a cargo de Mario Lugones, que asumió hace 10 días atrás. Esta política de cerrar el hospital Bonaparte no es aislada”.

Como respuesta a esta amenaza, lxs trabajadores iniciaron una serie de asambleas y marchas con lo que lograron llegar el 8 de octubre a una reunión con el viceministro de salud de la Nación – de la cual ha participado Guerén -, donde el gobierno se compromete con la creación de una mesa de trabajo conjunta; a evaluar las variables de reestructuración propuestas por el Ministerio y a dar continuidad a la fuente de trabajo del personal del hospital.

Lxs trabajadores del hospital y las afiliadas a la ISP siguen movilizadas para poner fin a las amenazas de cierre del hospital y la defensa de los servicios públicos de salud en Argentina.